400 snowboarders se juntan para celebrar los 10 años de Stuntwood Session, con un final agridulce

En el medio de Suecia, lejos de las montañas y en una zona plana se encuentra la pequeña ciudad de Falun que curiosamente alberga una fuerte comunidad de snowboarders y mountainbikers. A pesar de que las montañas les quedan lejos, tienen un pequeño montículo en el que se encuentra la micro estación de Källviken y por su puesto el quizás más conocido Falu Snowpark. Riders muy top como Ylfa Rúnarsdóttir llaman esta su casa.

Durante diez años una de las tiendas de snowboard más queridas de Estocolmo ha celebrado aquí una gran fiesta de final de temporada para la que construyen un snowpark inspirado en howly bowly, dando rienda suelta a la imaginación de shapers y riders.

Este fin de semana, justo después de dos semanas que la tienda anunciara que está en bancarrota y cierra sus puertas definitivamente, ha tenido lugar la 10ª edición de la Stuntwood Session que ha reunido a 400 snowboarders para una sesión increíble que ha transcendido entre generaciones de snowboarders del país escandinavo. Desde la leyenda de los 90 Ingemar Backman, hasta la actual super estrella Sven Thorgren, la islandesa Ylfa Rúnarsdóttir y las nuevas generaciones de riders que están subiendo también acudieron para disfrutar de una sesión inigualable con toda la escena del snowboard sueco.

Al mediodía todos los riders se congregaron en la cima para hacer una bajada masiva que nos puso los pelos de punta al constatar que no queda duda que es el evento de snowboard con más participantes del país. Un final agridulce para los propietarios de la tienda Stuntwood, pero que sin duda deja un legado muy fuerte para la cultura de nuestro deporte.